Oporto es una ciudad bohemia, con una belleza muy particular. Sólo quien ha tenido la suerte de disfrutar de un paseo por la Ribeira, frente al Puente Don Luis I, con el río Duero como testigo y las bodegas de Gaia como telón de fondo, sabe realmente a lo que nos referimos.
Estás a punto de conocer hasta el más mínimo detalle de una ciudad que enamora a quien la visita, quedándose una parte de su corazón para siempre.
Oporto suena a Fado, sabe a Francesinha, vino dulce y bacalao y está rodeada de un aura entre mágico y decadente, que hace de ella una de las ciudades más especiales del planeta.
Se trata de una ciudad con una gastronomía espectacular, cuya joya de la corona es su vino, famoso en todo el mundo.
¿Sabías que el país de Portugal tal y como se concibe hoy en día, nació en Oporto?
Estás a punto de descubrir la ciudad en la que J.K Rowling se inspiró para diseñar muchos de los escenarios de sus novelas de Harry Potter. Una ciudad que parece haberse quedado anclada en el pasado, pero que reúne todos los atractivos necesarios para convertir tus vacaciones en una experiencia turística inolvidable. Teniendo en cuenta además, que se encuentra en el norte de Portugal, a escasos kilómetros de la frontera con España , si todavía no la conoces, ya deberías estar reservando tu próximo viaje. Se trata de uno de los destinos más especiales de toda Europa.
La Ribeira
Sería imposible comenzar por otro lugar. La Ribeira, situada en el casco histórico de Oporto, junto al río Duero, es la calle más bella de la ciudad.
Lo tiene todo para componer una postal maravillosa. El colorido de las fachadas de sus casas, la imponente presencia del Puente Don Luis I siempre vigilante, la agitada vida del Duero en esa zona del cauce, la vista de las bodegas de Gaia en la orilla opuesta… Por si todo esto fuera poco, suele estar poblada por músicos callejeros que rinden culto al fado para terminar de crear un aura realmente mágica.
Sólo podemos ponerle una pega y es que, si bien los bares y restaurantes que colocan sus terrazas junto al río, pueden resultar muy suculentos, no suponen la mejor opción en términos de relación calidad -precio. Eso sí, disfrutar de las vistas y del ambiente junto al río, nunca está de más.
Una de sus curiosidades más importantes aparece justo en la base del puente, en forma de placa de metal, que siempre está cubierta por velas encendidas. Se trata de un pequeño homenaje que la gente local realiza en honor de las víctimas que perdieron su vida en la batalla contra las tropas de Napoleón. Allí se ubicaba por aquel entonces, el antiguo Puente de las Barcas, que durante el enfrentamiento, al no poder soportar el peso de los combatientes, se derrumbó acabando con la vida de muchos soldados.
La Ribeira es por méritos propios, la calle más fotografiada de Oporto y estamos seguros, de que a partir de ahora, también disfrutará de un lugar privilegiado dentro de tu muro de Instagram.
El Puente Don Luis I
Ya lo mencionábamos como uno de los principales protagonistas de la postal más famosa de Oporto, las orillas del Duero en su paso por la ciudad, próximo a su desembocadura.
El Puente Don Luis I pese a no ser uno de los monumentos más antiguos de la urbe, se ha convertido en su seña de identidad principal. El motivo es que se trata de un puente muy icónico, único en el mundo, que llama la atención por su grandeza y sus formas, con una maestría sobresaliente en el uso del hierro para construirlo.
Su construcción data del siglo XIX, motivada por el crecimiento comercial dentro de la ciudad y la necesidad de crear una alternativa más práctica, segura y eficaz al puente colgante que por aquel entonces unía Oporto con Nova de Gaia.
Pese a que la creencia popular lo relaciona con el arquitecto Gustavo Eiffel por su claro parecido con la famosa torre parisina, la verdad es que este majestuoso puente fue diseñado por Théophile Seyrig. Si bien es cierto que el arquitecto de la Torre Eiffel presentó un diseño en el concurso para ver quién sería el encargado de su construcción, fue finalmente su socio, el ingeniero alemán Théophle Seyrig, quien terminaría siendo el encargado del proyecto.
Existen varias pasarelas que te permitirán disfrutar de las vistas desde este emblemático lugar y además, se trata de uno de los pocos puentes de hierro en el mundo por el que pasa el metro. Por lo tanto, si tomas este medio de transporte para acceder desde Oporto a Nova de Gaia, también podrás contemplar la ciudad desde su parte más alta.
La Avenida de los Aliados y la Praça da Liberdade
Nos situamos en el corazón de la ciudad para descubrir su avenida y su plaza más importantes en términos económicos e institucionales y, al mismo tiempo, uno de los mejores sitios que ver en Oporto
Hablamos del centro neurálgico de la ciudad y el lugar donde se encuentran algunos de sus edificios más importantes y bellos. Buen ejemplo de ello, es el Ayuntamiento de Oporto, varias sedes de bancos, la Cámara Municipal de la ciudad y lo más sorprendente de todo: un Mc Donalds. Sí, estás leyendo bien, en la Avenida de los Aliados es posible visitar y comer allí, ya que se encuentra en activo, el que está considerado como uno de los Mcdonald’s más bellos del planeta, ubicado en lo que anteriormente fue el edificio histórico del famoso Café Imperial de la ciudad.
Aunque nuestra recomendación es que, ya que te encuentras en una de las ciudades en las que mejor se come de Europa, no te limites a contemplar su impresionante fachada y escojas alguno de los numerosos restaurantes de cocina local presentes en la ciudad. De hecho, justo allí, puedes aprovechar para visitar la Cafe Guarany fundada en 1933.
La Librería Lello
Al comienzo de la guía comentábamos que J.K.Rowling se inspiró en varias localizaciones de la ciudad de Oporto, donde vivió durante varios años, para construir el mundo de magia y fantasía de Harry Potter. No nos cabe duda de que la Librería Lello fue uno de esos lugares. No en vano, algunas de sus localizaciones actuales se han convertido en todo un homenaje a la exitosa saga del mago londinense.
Pero más allá de su parecido con la biblioteca de Hogwarts, la Librería Lello destaca por ser una de las más bellas e impresionantes de todo el mundo.
Su diseño de estilo neogótico y Art Nouveau con la madera como protagonista de excepción, la luz entrando a través de vidrieras llenas de colorido y sus míticas escaleras color carmín, crean en su conjunto un espacio verdaderamente mágico.
Sus estanterías llenas de libros a la venta, reúnen volúmenes en varios idiomas para que, si lo deseas, puedas llevarte como recuerdo de tu visita, cualquier obra escrita en tu lengua materna. De hecho, el precio de la entrada a la Librería, se descuenta posteriormente de tu compra, si deseas adquirir un libro en ella.
Está ubicada a sólo diez minutos a pie de la parada de metro de la Avenida de los Aliados y abre todos los días de la semana desde la mañana hasta la tarde en horario ininterrumpido.
Nuestra recomendación es que reserves tu entrada online para evitar las colas de la taquilla y la visites a primera hora de la mañana, que es el momento del día en que suele encontrarse menos masificada.
La Iglesia do Carmo y la Iglesia de los Carmelitas
No muy lejos de la Librería Lello, encontrarás un conjunto arquitectónico formado por dos iglesias, que constituyen uno de los mejores lugares que ver en Oporto
La más famosa, grande e importante es la Iglesia do Carmo, construida a mediados del siglo XVIII y cuyas fachadas principal y lateral, son realmente maravillosas. La primera, la fachada principal, destaca por su estilo rococó y las formas y diseños recargados construidos en piedra. La fachada lateral es todo un homenaje a los típicos azulejos portugueses, con dibujos en honor a la fundación de la orden de los Carmelitas.
Te recomendamos además, que visites su interior, en el que el estilo rococó vuelve a deslumbrar a través de un retablo del siglo XVIII en tonos dorados.
Al terminar tu visita, justo frente a la iglesia, en la Plaza Gómez Teixeira, puedes relajarte en un banco, escuchando el fluir del agua procedente de la Fuente de los Leones.
Como ves, Oporto es una ciudad llena de maravillas ocultas tras cada esquina, en cada plazoleta y en cada calle. Perderse por los callejones de su centro histórico es una experiencia increíble.
La Torre de los Clérigos
De nuevo, viajamos en el tiempo hasta el siglo XVIII para descubrir otro de los lugares imprescindibles que visitar en Oporto.
La Torre de los Clérigos, además de ser una de las iglesias más bellas y antiguas de la ciudad, destaca por constituir el mejor mirador para disfrutar del skyline de su centro histórico.
En tu visita, tendrás la oportunidad de ascender los 240 escalones para llegar a lo más alto de su campanario, contemplar las cuarenta y nueve campanas que forman un carillón en la parte superior de la Torre y deleitarte con la mejor panorámica de Oporto.
Si bien el ascenso al mirador conlleva un pequeño esfuerzo físico, te aseguramos que merece mucho la pena.
Aún a día de hoy, la Torre de los Clérigos continúa siendo uno de los edificios más altos de la ciudad y, durante muchos años, en sus orígenes, funcionaba como faro, ayudando a navegantes a orientarse por el Duero y localizar la ciudad de Oporto desde la distancia.
El Mercado de Bolhao
El Mercado de Bolhao es el mercado más grande e importante de la ciudad. Tras su renovación en 2022, se ha convertido en uno de los lugares que visitar en Oporto, tanto por su encanto particular, como por los diferentes atractivos gastronómicos presentes en sus puestos.
En las dos plantas que lo componen, encontrarás diferentes tiendas con productos frescos, flores, las tradicionales conservas portuguesas y algún que otro bar donde poder disfrutar de unas tapas y un refresco.
El Mercado de Bolhao ofrece una buena muestra de cómo es la vida portuense, con sus puestos llenos de frutas y verduras y multitud de transeúntes probando sus productos desde lo más temprano de la mañana. Tanto si tienes pensado adquirir o tomarte algo, como si no, te recomendamos que no te lo pierdas.
Majestic Café
Una de las principales curiosidades de las tres ciudades portuguesas más importantes, Oporto, Lisboa y Coimbra, es que las tres, tienen en su casco histórico, una cafetería clásica con cientos de años de historia y que destaca por su belleza interior. En Lisboa, encontramos A Brasileira, en Coimbra, el Café Santa Cruz y, en Oporto, el Majestic.
De las tres, nuestra favorita sin duda, es esta última, que además de su espectacular aspecto interior, que conserva al 100% su esencia original, añade un pequeño patio que igualmente, destaca enormemente por su belleza.
El Café Majestic abrió sus puertas en 1921, siendo lugar de reunión para escritores y demás intelectuales de la época. Durante la Segunda Guerra Mundial cerró sus puertas, pero en la década de los noventa, reabrió completamente reformado y manteniendo su diseño y estilo original.
Sin duda, hablamos de una de las cafeterías más bellas del mundo y que ofrece una carta muy suculenta, con propuestas gastronómicas de primera calidad.
Aunque sólo sea para disfrutar de un buen café dentro de un edificio único, te aconsejamos que lo incluyas en tu itinerario como una de las cosas que hacer en Oporto.
La Capilla de las Almas
Justo en el punto en el que se cruzan la calle Fernando Tomás y la calle Santa Catalina, encontrarás uno de los templos más pintorescos y especiales de todo Portugal.
La Capilla de las Almas es todo un homenaje a la técnica artística del azulejo, representativa del país y que en Oporto, se encuentra más presente que en ningún otro lugar.
Esta pequeña iglesia tiene sus orígenes en el siglo XVIII y destaca especialmente por sus fachadas frontal y lateral, que están decoradas con más de 16.000 azulejos que representan escenas en blanco y azul. En sus paredes, encontrarás varias escenas de la vida de San Francisco de Asís y Santa Catalina, de quienes además, puedes visitar sendas imágenes en el interior de la capilla. Junto a ellos, se encuentra la imagen de la Vírgen de las Almas, quien da nombre al templo, representada en una figura de más de dos siglos de historia.
La Estación de Sao Bento
No exageramos al afirmar que la Estación de Sao Bento es una de las estaciones de tren más bellas de todo el mundo.
El motivo principal es su espectacular hall, en el que de nuevo, la técnica del azulejo portugués se convierte en una gigantesca obra de arte para narrar a través de diversos dibujos, parte de la historia de Portugal. La composición consta de más de 20.000 azulejos que al atardecer, adquieren un brillo especial, formando una escena realmente mágica. No es de extrañar, que la entrada a la estación se encuentre casi siempre llena de turistas, aunque muchos de ellos no tengan ningún tipo de interés en coger un tren.
Desde la Estación de Sao Bento,tienes la oportunidad de subirte a la conocida como, Vía Férrea del Duero, un itinerario en tren que transcurre a orillas del río, recorriendo los paisajes y localidades de sus orillas. Sin duda, hablamos de uno de los principales atractivos que ver cerca de Oporto y una excursión muy recomendable, si te apetece alargar durante unos días tu estancia en Portugal.
Las Bodegas de Nova de Gaia
Las Bodegas de Nova de Gaia constituyen, además de las impresionantes vistas de la ciudad, el principal motivo por el que cruzar el Puente Don Luis I.
Y es que, no hay visita a Oporto que se precie sin visita a una de sus bodegas con cata incluida.
El vino de Oporto es famoso en todo el mundo y las exportaciones de las bodegas en esta orilla del Duero, abarcan cientos de países.
Si tuviéramos que recomendarte dos bodegas para visitar, nos quedamos con Cálem y Graham’s, dos de las más representativas de la ciudad. La Bodega Sandeman también es una de las más conocidas, con su mítico icono del personaje con sombrero y capa negra.
El Convento de Santa Clara
Seguramente, a estas alturas de nuestra lista de recomendaciones, te extrañe no haber encontrado presente a la Catedral de Oporto. Si bien, su visita puede ser recomendable, especialmente en términos históricos, la verdad es que existen otros edificios de carácter religioso mucho más interesantes y bellos dentro de la ciudad.
Un buen ejemplo de ello es nuestra última parada, el Convento de Santa Clara. En cuanto pises su interior, vas a entender por qué no podíamos dejarlo fuera de nuestra lista.
Este convento de la orden de los franciscanos se presenta a través de una fachada en sobrio estilo gótico, que contrasta a más no poder, con su espectacular interior, de estilo barroco especialmente recargado.
Al cruzar su umbral directamente, te sorprenderá el impresionante trabajo de madera en tonos dorados cubriendo tanto su techo como sus paredes.
Se trata sin duda, de uno de los templos religiosos más asombrosos de todo Portugal y una parada obligatoria para poner el broche de oro, nunca mejor dicho en este caso, a nuestras propuestas de los imprescindibles de Oporto.
Preguntas frecuentes Oporto
¿Qué lugares no te puedes perder en Oporto?
Si bien esta ciudad reúne un sinfín de motivos por los que merece la pena visitarla, los imprescindibles que no te puedes perder en Oporto son, sin duda, el paseo por la Ribeira, con el Puente Don Luis XI, las bodegas de Nova de Gaia, el Majestic Café, la Librería Lello y el Convento de Santa Clara.
¿Dónde comer en Oporto?
Los alrededores del centro histórico de la ciudad, ofrecen una gran variedad de opciones donde comer la deliciosa cocina portuguesa. El plato más típico de Oporto es la Francesinha y el lugar más famoso para probarlo es sin duda, la Cafetería San Francisco.
Pero a decir verdad, la gastronomía autóctona abarca muchas otras delicias, que no te puedes perder.
¿Qué comida es típica de Oporto?
Si bien la Francesinha es, posiblemente, la comida más típica de Oporto, existen muchas otras recetas locales que merece la pena probar. Algunos ejemplos son el pulpo en salsa verde, el Bacalao à Bràs, las sardinas asadas, los cachorrinhos, las papas Sarrabulho o los buñuelos de bacalao.
¿Cuánto tiempo necesitas para ver Oporto?
A pesar de que no es una ciudad especialmente grande, te recomendamos que emplees, como mínimo, tres días para ver Oporto. Y si puedes alargar tu estancia hasta los cinco días para no perderte nada, mucho mejor, ya que en su poca extensión reúne una enorme cantidad de lugares de interés para visitar.
¿Cómo viajar a Oporto?
Su cercanía con muchas ciudades de nuestro país, hace que viajar en coche a Oporto sea una gran opción. Además, la ciudad cuenta con su propio aeropuerto internacional, ubicado a media hora de su centro histórico y también ofrece la opción de visitarla en tren, con su preciosa Estación de Sao Bento como bienvenida inigualable.
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